Urano a través de Tauro
La entrada de
Urano en Tauro nos habla de una relación difícil. La “mente cósmica”, aquel que
desvela los secretos, entra en Tauro, el signo del deseo fijo, el signo donde
las formas lunares encuentran su exaltación. Las formas densas y sensuales de
la naturaleza deben reconocer la llegada de las novedosas ideas que siempre
trae consigo Urano, y esto no es fácil.
Es claro que el
planeta espiritual y ocultista por excelencia no está cómodo en Tauro, Urano
está en caída en el signo donde la luz se expresa a través de las formas lunares/terrenales
exaltadas.
Por otro lado la
Luna cae en Escorpión y Urano se exalta en él porque es en el signo contrario a
Tauro donde se trasciende el poder de
las formas, demostrando que es a través del desapego que la Libertad (Urano)
puede realizar su labor; la libertad pide flexibilidad, y la mente “cósmica”,
vinculada a las leyes ocultas, necesita del desapego de las viejas normas para
imponer las nuevas que el mismo desvela.
Así pues, la
pregunta que nos podemos hacer es: ¿cómo se va a desarrollar Urano, la mente divina,
en el signo donde más se muestra el apego/deseo por las formas de la madre
naturaleza?, ¿cómo se va a interpretar a Urano, “el revolucionario”, desde el
signo donde el deseo tradicional por las formas es vivido como una necesidad
natural?